Mi infancia en los faros por Juan Ángel Trillo (1ª parte)

Tenemos una novedad en el blog. Se trata de la publicación de cinco historias reales contadas por el hijo de un farero. Son vivencias únicas, narradas desde el recuerdo y con mucho afecto hacia la profesión de su padre, Juan Trillo.

Nosotros tuvimos la fortuna de contactar con su hijo, Juan Ángel Trillo, durante la pandemia. Y tras escuchar sus recuerdos, le propusimos compartirlos con todos vosotros. Algo a lo que accedió desinteresadamente. Juan Ángel es el protagonista de esta serie de relatos que iniciamos hoy y que compartiremos con vosotros semanalmente.

Antecedentes

Recuerdo que mi padre trabajaba en el faro de Vinaroz, un faro de 6.º orden, clasificado como faro de descanso. (En realidad no era un faro propiamente dicho, sino un balizamiento). Era el faro  que se reservaba a aquellos fareros que habían estado destinados en un faro aislado durante muchos años y se les ofrecía la posibilidad de desempeñar sus últimos años en la profesión de forma relajada. De ahí, la denominación de faro de descanso. {Mi padre no cumplía esa condición, pero había estado en excedencia y al volver al Cuerpo Técnico-mecánico de Señales Marítimas, era unas de las plazas que estaba libre}. Por eso, mi hermana Blanca y yo nacimos en Vinaroz.

Mi padre, tras una reorganización del Servicio y automatización del balizamiento, se vio obligado a solicitar otro destino y pasó a prestar servicio en la Jefatura de Costas y Puertos de Castellón, en la plaza de técnico Suplente. Su función era suplir a los fareros de la provincia durante las vacaciones o en cualquier otra eventualidad. Aunque la mayor parte del tiempo estaba en un despacho de la Jefatura de Costas, ocupándose de los asuntos burocráticos relativos a los faros.

Cuatro años después volvió a reorganizarse el Servicio y la Jefatura de Castellón fue absorbida por la de Valencia… Así que nuevo traslado, con las mismas funciones, pero en Valencia.

Recuerdo que el ámbito de trabajo era bastante [más] amplio, abarcando los faros existentes entre Peñíscola (Castellón) y Mazarrón (faro de Águilas, Murcia). Gracias a eso pasamos por los faros de Oropesa, Grao de Castellón, Columbretes, Cullera, San Antonio, La Nao, Cabo Huertas, Cabo de Palos y Portmán.

Autor: Los faros del mundo

Egresado del primer máster de "Historia y Patrimonio Naval" de la Universidad de Murcia que pretende conseguir y difundir la mayor cantidad de información posible sobre el fascinante mundo de los faros.

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