Contamos con un nuevo colaborador. Se trata de Andy Franco, aunque nos vamos a referir a él por su nombre en el blog “Andyfrancolive”. En el que nos habla -De Viajes y Cosas-. Os dejamos el enlace para que le echéis un vistazo.
Andyfrancolive es un colombiano al que le apasiona viajar para conocer otras culturas. En su último gran viaje ha pasado cinco meses en Sri Lanka. En esa preciosa isla tuvo la oportunidad de visitar la antigua capital del país, Colombo. Además, fue a ver el கொழும்பு கலங்கரை விளக்கம் “faro de Colombo”, y ha querido compartir con todos nosotros esa experiencia inolvidable.
El faro de Colombo, también conocido como “Galle Buck lighthouse”, fue construido por los británicos en 1952 [en aquel momento el país se denominaba Ceilán, puesto que había dejado de ser una colonia británica en 1948]. El faro se encuentra en la punta de Galbokka, en el interior del Fuerte Colombo [una batería artillada construida por los holandeses]; al sur del puerto de la ciudad.
A continuación, os transcribimos lo que nos contó Andy.
Hay una canción de Jorge Drexler, de las primeras que conocí, una gran amiga y escritora mía por esos días me la enseñó al igual que muchas otras de este autor uruguayo. Se llama <12 segundos de oscuridad>. No hay analogía, es real, el faro:
Jorge Drexler -12 segundos de oscuridad- «…Un faro quieto Nada sería Guía mientras No deje de girar No es la luz Lo que importa en verdad Son los 12 segundos de oscuridad 12 segundos de oscuridad…».
Es de mis preferidas y aunque ya tiene unos añitos, resume la labor de los colosos, que se yerguen en las penínsulas o en aquellos lugares apartados. Un árbol nunca cae, si no hay nadie que escuche su estruendo, dice alguna frase por ahí más o menos. Los faros, son como esos árboles que caen, pero su señal se escucha de otra manera. Silentes, detenidos en el tiempo, casas de aves, refugios de la luz, cuando el sol muere, el faro nace. Sólo para eso, iluminar. Aquí donde vivo, hay un fuerte, para mi es pequeño, pero hay un faro. El país se llama Sri Lanka, y el faro está justo de camino al puerto oficial internacional, de su capital Colombo.
Muchas gracias, Andy, por esta extraordinaria historia.